Aprobación de Gobierno Diciembre 2018

Estabilidad y saldo negativo: ese sería el diagnóstico si hubiera que resumir en pocas palabras el comportamiento durante 2018 de la opinión pública uruguaya respecto a la actual gestión gubernamental del Dr. Tabaré Vázquez. En efecto, de acuerdo a la edición de diciembre de 2018 de nuestro Monitor de Opinión Pública, las tendencias registradas son muy similares a las de los trimestres previos, con variaciones muy pequeñas comprendidas dentro del margen de error. Como se observa en el gráfico 1, un 43% califica la gestión gubernamental en forma negativa (un 27% la considera “mala” y otro 16% “muy mala”), en tanto un 27% la evalúa positivamente (desglosado en un 23% que la considera “buena” y un 4% que la considera “muy buena”). Además, 3 de cada 10 ciudadanos califica a la gestión “como ni buena ni mala”.

Observando la serie histórica a lo largo de todo el gobierno del Dr. Vázquez, queda de manifiesto la existencia de dos grandes períodos. En el primero, coincidente con los dos años iniciales de gestión, la evaluación de gobierno mantuvo una tendencia de leve saldo negativo, siendo entre 5 y 8 puntos mayor la desaprobación que la aprobación según el trimestre específico considerado. A partir de mayo 2017, hay un cambio en la opinión pública, con un crecimiento de varios puntos en el nivel de desaprobación a expensas de una caída en el porcentaje de quienes no consideran buena ni mala la gestión, permaneciendo más bien estable el porcentaje de quienes aprueban la gestión. Con este cambio, el saldo negativo de aprobación de gobierno pasó a ser en todas las mediciones de dos dígitos (con la única excepción de setiembre de 2017), con un promedio -14 puntos tomando como referencia las 8 mediciones realizadas desde mayo 2017 en adelante.

Como hemos marcado en informes anteriores, la actual tendencia constituye un cambio significativo respecto a las dos anteriores administraciones frenteamplistas, en donde existió un claro predominio de quienes aprobaban sobre quienes desaprobaban la gestión gubernamental. Por ejemplo, en noviembre de 2009 (cinco años antes de la medición realizada y a similar altura de la gestión), 39% de los uruguayos aprobaba la gestión del gobierno de José Mujica y un 28% la desaprobaba, marcando un saldo positivo de aprobación de +11 (ver gráfico 3).

Este nuevo y más adverso panorama en relación a la evaluación de gestión gubernamental constituye un importante desafío para el oficialismo de cara al año electoral, en la medida que dicha variable tiene probada incidencia sobre el comportamiento electoral. El gráfico 4 muestra al respecto una contundente asociación entre el grado de aprobación de la gestión de gobierno y la probabilidad de votar por el oficialismo o por la oposición. Mientras únicamente un 4% de quienes evalúan como mala o muy mala la gestión votarían hoy al FA, lo haría en cambio un 67% de quienes la consideran buena o muy buena. A la inversa, 23% de quienes sostienen una visión favorable sobre el gobierno votarían a un partido de la oposición frente a un 73% de quienes lo desaprueban. No obstante, es una hipótesis posible que ocurra un repunte favorable de la aprobación gubernamental en el último año de gestión, consecuente con la campaña electoral y la comunicación de logros de gestión. Tanto la primera gestión del Dr. Vázquez como la presidencia de José Mujica evidenciaron de hecho una mejora en los niveles de aprobación en el último año de sus respectivas presidencias, aunque partiendo desde niveles de aprobación bastante más favorables que en la actualidad. En cualquier caso, es claro que la aprobación de gestión es una de las variables clave a seguir monitoreando mientras transcurre la campaña y se resuelven las diferentes instancias comprendidas en el ciclo electoral.

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